martes, 21 de julio de 2015

Volvieron las obras..., pero se multiplican los interrogantes.

Como suele suceder en la mayoría de las "historias", a la hora de ser contadas por primera vez, o bien actualizadas en su situación, tiempo después, por lo general existen noticias "buenas" y novedades que no lo son tanto, ante lo cual el interlocutor tiende a elegir a cual de las dos prefiere escuchar primero.

En este contexto, casi lúdico por necesidades "arteriales" e intenciones editoriales de contar la verdad de la manera más "amigable" y "agradable" posible, sin por ello obviar la revelación de la propia "verdad", que en definitiva constituye lo verdaderamente importante y el eje fundacional de nuestra labor profesional, y con relación a la actualidad pertinente a la segunda etapa de obra de nuestro estadio, debemos advertir que contamos en la fecha, con una noticia "buena" y otra no tanto.

Si comenzáramos por la "buena" nueva, es dable destacar la reanudación de las obras correspondientes a la segunda etapa de construcción de nuestro nuevo estadio, dentro de un avance de obra lento, bien lento..., pero avance al fin.

En este punto, y en las imágenes que acompañan a la presente, por labor y gentileza, como siempre, de nuestro amigo Osvaldo Abades, pueden apreciarse los avances en materia de vestuarios, pileta y locales comerciales, fotos que sin dudas y por sí mismas, resulta indudable que constituyen demoradas y ansiadas confirmaciones positivas y, por ende, buenas noticias.

Sin embargo, la contracara casi ineludible de aquellas esperadas buenas noticias, se ve encarnada en la divulgación de un nuevo cronograma de fechas límites, por definirlo de alguna manera, para la finalización de obra de los faltantes correspondientes a esta segunda etapa que, insistimos en recordar y subrayar, debió completarse en su totalidad, el pasado 1° de junio del corriente, esto es, hace ya un mes y veinte días, exactamente.

De esta manera, las nuevas fechas establecidas para la finalización de las obras en falta, y sin embargo en curso, sin referencia alguna a la consumación de las penalidades económicas contempladas para estos incumplimientos de parte, en el propio contrato de fideicomiso que enmarca los derechos y obligaciones legales de todos los actores intervinientes en el emprendimiento del Nuevo Francisco Urbano, son en definitiva, las que siguen:

30 de septiembre de 2015: nuevo plazo previsto para la finalización de vestuarios y locales comerciales.

15 de noviembre de 2015: nuevo plazo previsto para la finalización de la pileta y las áreas parquizadas, correspondientes a la segunda etapa.

30 de noviembre de 2015: nuevo plazo previsto para la finalización de la sede social definitiva, sobre la Av. Hipólito Yrigoyen.

Ante la evidencia de un novel "acuerdo" no contemplado en la letra del fideicomiso y, al mismo tiempo, una vez más y como ocurriera en incontables ocasiones, para los más variados temas (cerramiento del bajo Capelli; permiso para el uso público de las instalaciones del estadio, incluido su campo de juego; autorización para la realización de toda clase de eventos, en términos de alquiler de los espacios físicos y su explotación comercial, con la consecuente depreciación de los bienes societarios, etc), mediante decisiones tomadas "en silencio", subrepticiamente y olímpicamente a espaldas de la masa societaria de nuestra institución, es aquí que nos preguntamos, en reiterada ausencia de la más mínima, elemental y considerada explicación oficial:

1) ¿Cuándo fue que se llegó a un nuevo acuerdo para la ampliación de los plazos de finalización de obras, correspondientes a la incumplida segunda etapa del emprendimiento?. Máxime, teniendo en cuenta que, de manera pública, la última información con que se contaba, era la postergación de la reunión pautada con los funcionarios municipales encargados del tema, en virtud y siempre de acuerdo a las propios términos oficiales, vertidos vía comunicado oficial de la institución, dicho cónclave NO se había realizado por la negativa de los miembros de la Comisión Ad Hoc, a participar de la misma, debido a la ausencia preanunciada, tanto del inversor como de la empresa constructora encargada de las obras.

2) En virtud de lo referido anteriormente, ¿cuándo hubo de concretarse una nueva reunión, que evidentemente permitiese a la partes arribar a un acuerdo renovado sobre plazos de finalización de obras inconclusas y, al mismo tiempo, por qué no se dieron a conocer públicamente sus alcances y términos, de igual modo que se hiciera al momento de la suspensión de aquél primer cónclave?.

3) En este caso, y de haberse concretado la precitada reunión (puesto que, de algún lado hubieron de surgir estas nuevas fechas, a fin de facilitar el novel "entendimiento"), ¿en esta ocasión finalmente sí, acudieron al cónclave los representantes de la empresa "Bautec" y del "Grupo Desarrollador Morón", o fue el municipio quien articuló el acuerdo de partes y "representó" en los hechos, las intenciones, decisiones y propuestas, tanto del constructor como del inversor?. Y en el primero de los supuestos, ¿por qué no se cursaría invitación formal o informal a los miembros de la Comisión Ad Hoc, dado el interés manifiesto de los mismos, en entrevistarse personalmente y escuchar de propia boca de unos y otros (constructora e inversores), las razones de la demora y de los faltantes de obra, correspondientes a la primera etapa, y relevados oportunamente por la propia Ad Hoc?.

4) Ante cualquiera de los supuestos anteriores, del punto 3, ¿por qué no se comunicó oficialmente a la masa societaria, la realización, términos y acuerdos alcanzados en dicha reunión?.

5) ¿Este nuevo cronograma inconsulto (de prórroga encubierta) se halla contemplado en el contrato de fideicomiso vigente?.

6) ¿Se realizó, por parte del club, alguna denuncia o reclamo formal, por ante el administrador fiduciario (el Grupo Banco Provincia), para la efectivización de las moras por incumplimiento, estipuladas en el mismo contrato o, por el contrario, este nuevo acuerdo y plazos de finalización de obras inconclusas, extiende en los hechos, los términos para el reclamo de dichos punitorios, del 1° de junio al 30 de noviembre venidero?.

7) En el caso de ser esto último correcto, ¿por qué no se hizo público a los socios, por las vías de comunicación institucionales habituales o, incluso, mediante la convocatoria a una Asamblea Extraordinaria de Socios, de conformidad con nuestro Estatuto Social?.

8) ¿Este nuevo cronograma de fechas, para la finalización de los faltantes de obra de la segunda etapa, implicará también una extensión del plazo máximo correspondiente a la tercera y última etapa del emprendimiento, puesto que dicho lapso de 18 meses, corría original y contractualmente a partir del pasado 1 de junio del corriente, y no del venidero 30 de noviembre de este año?.

En definitiva y como suele suceder en toda "historia", existen "buenas" nuevas y otras no tanto, a la hora de relatar los hechos desde el comienzo, o bien referirse a las actualizaciones circunstanciales de sus avances.

Y en el caso puntual de la continuidad en la construcción del Nuevo Francisco Urbano, la "buena", sin dudas, es que se reanudaron las obras, y como contrapartida casi insoslayable, es que las mismas se hallan cubiertas de un "manto de duda" cada vez más grande y que, desde octubre de 2014 a esta parte, el SILENCIO ha sido el ARQUITECTO predilecto elegido por la gestión de Diego Spina.


Gustavo Adrián Requelme.
@elgallogustavo.













                         Fotos: gentileza, Osvaldo Abades (h).

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